El bordado Luneville es una técnica de bordado utilizada en la alta costura internacional, tanto en vestidos como en accesorios. Es una técnica tradicional francesa presente desde el siglo XIX. Se caracteriza por hacerse a mano, mediante el uso de una aguja similar a la del crochet, que permite insertar diferentes tipos de pedrerías sobre seda, tul, organza y otros materiales.
Se encuentra en los diseños de reconocidas casas de alta costura como Azzaro, Chanel, Christian Dior, Elie Saab, Hermès, Georges Hobeika, Jean Paul Gaultier, Jesús Del Pozo, Ralph & Russo, Valentino, Versace, Yves Saint Laurent, Zuhair Murad….
Con el bordado Luneville se crean espectaculares bordados tridimensionales que convierten cada diseño en una pieza única e irrepetible. Se utiliza en alta costura, ceremonia o novia pero también en complementos de lujo. Con el bordado Luneville se puede hacer una pieza entera o simplemente un detalle, como el puño de una manga, un cinturón, botones, un bolsillo, la solapa de una chaqueta sastre o la de un bolso. Los detalles marcan la diferencia, ya que añaden un valor que hace que estas piezas no pasen desapercibidas.
Antes había que ir a París a aprender a bordar con la técnica Luneville. Actualmente hay un par de expertos bordadores en España. Uno de ellos es Marcelo Calabrese, profesor de Escola Cànem. Recientemente ACUMOVA (Asociación para la promoción de la cultura y moda valenciana) le ha hecho una entrevista al maestro para saber más de él y de esta espectacular técnica: https://acumova.es/visitamos-la-escuela-canem-para-para-hablar-con-marcelo-calabrese/
Uno de los últimos hitos de Marcelo ha sido asistir a la última edición de la BBFW (Barcelona Bridal Fashion Week) como artista escogido por la plataforma para así acercar la técnica del bordado Luneville al mercado nacional e internacional.
Marcelo, además de experto bordador de Luneville, se caracteriza por su objetivo de “democratizar” el Luneville: hasta hace muy poco aquellos que querían aprender, tenían que desplazarse a París, ya que sólo conocían esta técnica los que trabajaban en las casas de alta costura parisinas. Por esta razón y porque los materiales utilizados eran muy costosos por su altísima calidad, sólo podían acceder al conocimiento del Luneville unos pocos. Su objetivo es pues democratizar este aprendizaje para que esté al alcance de muchos. Y es más, a Marcelo le gustaría que Escola Cànem fuera el centro Luneville de referencia en España. Un objetivo ambicioso, pero la pasión mueve montañas.
Salud Domingo.